Recuerdo que a los 13 años yo aùn me comportaba como lo que era: una niña un poco mas grande iniciando su madurez fìsica (porque la mental...), pero siempre, como he comentado en otro post, rebelde ante el menosprecio cronològico, que jamàs nunca ha sido justo, para nadie.
Asì que de la misma manera que ejecutaba juegos ya tontos para entonces, me enfrentaba a los inalcanzables adultos con la firmeza de un Juez, defendiendo claro està, mi causa ùnica y natural: mi derecho a ser tratada con respeto y a ser escuchada y comprendida en mi justo nivel.
Pues dentro de todo este contexto de vida, sucediò algo curioso, como nos ocurre a todos al menos una vez (o màs), y es que en uno de esos momentos tìpicos de soledad inconsolable y de megadranatismo juvenil, me creè yo misma la necesidad de tener una compañìa hecha a mi medida, algo asì como el "amigo invisible", pero mas sublime. Pasè muchas noches en vela tratando de descubrir quien o que era realmente yo y por què era, segùn miestrecha mentecita, tan diferente al resto de mi familia. Asì que una noche, aburrida, molesta por la falta de sueño, decidì que una ducha calentita me iria bien para relajarme, y al caminar por el pasillo tan oscuro hacia el baño, sentì un miedo paralizante, como no recuerdo haber sentido nunca màs, y me quedè en medio del pasillo temblando y sin poder moverme ni gritar. Entonces recordè que mi madrina siempre me hablaba de los angeles, llenos deluz, protectores, celestiales, y conforme rememoraba sus hostorias, fuè apareciendo a mi lado el mas hermoso àngel que se pueda imaginar: blanco, con alas doradas excesivamente refulgentes y unos rizos que ni la mejor permanente podria lograr!! Asì que le tendi mi mano y me llevò al baño y me acmpañò en toda mi faena, y cuando hube terminado, despareciò.
Fuè tal la paz que sentì, que a partir de esa noche quedò decretado que seria mi mejor amigo (o amiga?) y que asi nada temeria nunca màs... realmente la amistad continuò, pero nunca mas pude verle. Le contè a mi madrina lo sucedido y que yo seguia en contacto con este ser de luz, pero que nopodia verle, y saben que me resondiò:
"claro que le ves mi amor...cuando estas ante el espejo!! Diosssssssss, aquello fuè un impacto para mi, pues entonces me llenè de confusiòn y dudas, pensando que yo me desdoblaba en un àngel o algo asi, o que yo no era real, sino etèrea.
Como es natural me llevò mi tiempo descubrir, con ayuda de mi madrina, las maravillas de la mente humana y de como podemos activar nuestro mecanismo de defensa, igual que los animales, por cierto, para protegernos de lo que nos asusta o amenaza. La ùnica amenaza en mi vida era yo misma, empeñada en ser especial y no aceptarme como soy, cosa comùn entre los mortales.
Reitero con esto entonces, una vez mas, que somos ùnicos, especiales, y que cada uno de nosotros aporta al universo diferentes energìas, que a su vez, generan diferentes situaciones que alteran nuestras vidas, para bien, o para mal.
Todo, pero todo, voluntaria o involuntariamente es consecuencia de lo que hacemos, pero eso cuesta entenderlo sin sentirnos culpables.
Saquemos pues, cuando tengamos miedo, a ese àngel bueno y luminoso que mora en cada uno de nosotros y que dejamos dormir demasiado para darle paso a la vanalidad.
Un abrazo muy especiala luz de israel, maravillosa profesional que me ha dignado con u bello comentario y que me ha iluminado con sus escritos tan limpios y espiritual.
Hagamos todo en armonia con el universo y deseemos siempre lo que es mejor para nosotros y los emàs, no solo lo que queremos...
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